Mayte Albores

Normalmente lo que escribo lo tengo en la cabeza, en los ojos, en la piel, en el cuerpo... no necesito pensar...

¡Lo que escribo soy yo hecho palabra!



El fuego se apaga con sed.
Al final todo será un mismo infierno que aprendemos a amar ¿será, eso, la felicidad?


Aprieto los labios
con la fuerza
de dejar
mi boca morada.

Los gemidos, internos,
se agolpan al deseo de salir
en un grito espantoso detenido
en nudo
de garganta.

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lunes, 23 de enero de 2012

Vuelve la mujer

Se desliza rodeando el hombro
el tirante de la blusa.
El pecho blanco,
que rompía el contraste de la noche,
me entregó los secretos de la luz.

No fue exhibicionismo
compartir la belleza matriz
de lo femenino.

Ellos, ciegos de mente,
vieron pecado y metal
en la piel libre,
mientras fui arena embestida
por la espuma,
y  una aleación
de hierro incandescente
que desafía lo terrenal.

(Antes de partir - Mayte Albores)

1 comentario:

Teyalmendras dijo...

¿ Quien pude ver pecado en el milagro de la vida?

Saludos almendrados ;)


MÁS PUTA QUE NUNCA:
UN ALMA SE VENDE
POR SENTIR UN ESCALOFRÍO
INDESCRIPTIBLE