Mayte Albores

Normalmente lo que escribo lo tengo en la cabeza, en los ojos, en la piel, en el cuerpo... no necesito pensar...

¡Lo que escribo soy yo hecho palabra!



El fuego se apaga con sed.
Al final todo será un mismo infierno que aprendemos a amar ¿será, eso, la felicidad?


Aprieto los labios
con la fuerza
de dejar
mi boca morada.

Los gemidos, internos,
se agolpan al deseo de salir
en un grito espantoso detenido
en nudo
de garganta.

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martes, 21 de junio de 2011

Déjame cerca de ti

El hielo,
es tan frío,
que anestesia,
para quemar,
y mata igual que la angustia.


Quisiera sumergirme
en tu amargura,
aunque declares
que eres un pedazo
de nieve,
que muere lentamente


y que no puedes fundirte
en mi cuerpo,
ahora, perdido en el silencio
y en un camino sin marcas
por hacer.


Pero déjame asumirte,
helarme,
anestesiarme,
quemarme,
y morir un poco cada día,


que si lo hago, contigo,
sentido tendrá esta vida,
en cada intento de protesta
por un corazón
con latido por reanimar,
y por la posibilidad
de recuperar algo de ti.


¿Alguna vez imaginaste
que mis ojos podrían
llegar a ahogarse
en una sola lágrima
nacida de ti?

¿Que tu dolor
sería una daga
que me desangra
como a un cordero
mirando a la Meca?


Déjame que muera contigo.
No me apartes
cuando sientas
que eres tormenta,

porque tu lluvia,
que recala por mis huesos,
me deja la sensación
de sentir la piel al extremo
de un recién nacido a la vida.


Déjame que muera contigo.
Que si queman tus miedos,
también siento como tus ojos
son la luz de encuentro,
de la caricia,
del deseo...


Déjame que muera contigo,
porque sin ti,
ya "sería" muerta.


Déjame que muera contigo,
porque contigo,
es el único modo que encontré
de sentirme viva.

viernes, 3 de junio de 2011

Las garras de la vida

Porque
en el calor más extremo,
todavía germinan las flores,
parimos las hembras,
y maullan las ganas de vivir.

Porque
aunque todo parezca secarse,
es obvio que siempre
humedemos los labios
en busca de la palabra no dicha,
y los silencios se rompen
con un solo gemido.

MÁS PUTA QUE NUNCA:
UN ALMA SE VENDE
POR SENTIR UN ESCALOFRÍO
INDESCRIPTIBLE