Mayte Albores
Normalmente lo que escribo lo tengo en la cabeza, en los ojos, en la piel, en el cuerpo... no necesito pensar...
¡Lo que escribo soy yo hecho palabra!
El fuego se apaga con sed.
Al final todo será un mismo infierno que aprendemos a amar ¿será, eso, la felicidad?
Aprieto los labios
con la fuerza de dejar
mi boca morada.
Los gemidos, internos,
se agolpan al deseo de salir
en un grito espantoso detenido
en nudo de garganta.
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MÁS PUTA QUE NUNCA:
UN ALMA SE VENDE
POR SENTIR UN ESCALOFRÍO
INDESCRIPTIBLE
9 comentarios:
Tampoco me importaría quedarme ciego así...
Sublime!!!
Haces versos, trasmites vida :))
Besos de admiración
Genial!!!!
Si es de esa forma, viviría ciega toda mi vida.
Precioso!
Un beso:)
Despertamos y damos paso al resto del día......en esa ceguera que describes el día que queda por transcurrir aparece repleto de luminosidad. ¡¡¡Quedémonos ciegos entonces!!!!
Besos y abrazos.
maravilloso poema, maravilloso, aliento de vida
Un beso grande
Palabras magicas iluminan esta ceguera de tus versos.
Magnifica entrada...
Saludos ;)
¡Bravo! la buena letra siempre será fruto de admiración...
preciosos versos mayte,muy bonito lo que escribes
Este poema no sólo se lee, se huele o se ve, estos versos se sienten como rocío fresco de primavera, como sol ardiente de verano como ola brava de otoño, como pluma blanca al viento del invierno.
Pero mira que escribes bien!!!!
Abrazos Mayte.
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