Me gustan los ombligos ahumados,
besarlos y traspasarlos.
Que a veces el amor permite ver
que hay más agujeros que el propio.
Mayte Albores
Normalmente lo que escribo lo tengo en la cabeza, en los ojos, en la piel, en el cuerpo... no necesito pensar...
¡Lo que escribo soy yo hecho palabra!
El fuego se apaga con sed.
Al final todo será un mismo infierno que aprendemos a amar ¿será, eso, la felicidad?
Aprieto los labios
con la fuerza de dejar
mi boca morada.
Los gemidos, internos,
se agolpan al deseo de salir
en un grito espantoso detenido
en nudo de garganta.
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lunes, 27 de mayo de 2013
viernes, 3 de mayo de 2013
Orín
El silencio se orina sobre mi
y ya no me avergüenza la mancha,
reconocer
que sigo siendo esa niña que, aún,
no ha aprendido ni a hablar.
("Confesiones Para-Normales" - Mayte Albores)
y ya no me avergüenza la mancha,
reconocer
que sigo siendo esa niña que, aún,
no ha aprendido ni a hablar.
("Confesiones Para-Normales" - Mayte Albores)
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MÁS PUTA QUE NUNCA:
UN ALMA SE VENDE
POR SENTIR UN ESCALOFRÍO
INDESCRIPTIBLE